Antes de mi muerte
Proclamo el autoterrorismo...
Todo cuanto se me acerca lo destruyo.
Destrui a mi madre cuando naci,
fui su ultimo hijo;
Destrui mi infancia,
gane todos los golpes que salieron a sorteo
y encontre otros miles, tirados por los suelos, que no me pertenecian...
tal como los coches era mi cabeza un paragolpes.
Destrui mi pubertad,
demasiados dolores guardados casi logran
que automutilara mis manos...
pero no fui capaz.
Destrui mi adolescencia,
tantas palabras en boca y tanto amor en el silencio,
tantas verdades calladas, tantos lamentos...
me abocaban a un suicidio que por suerte no llego.
destrui mi juventud,
la lectura y el encierro en mi cabeza se hicieron con los hilos de mi vida tornandome en marioneta.
Destrui mi juventud, me hice viejo antes de tiempo,
aunque algunas veces pienso que ya naci siendo anciano.
Luego lo pienso dos veces y comprendo que no es cierto.
destrui todo lo amado,
renegue de mis raices, mi familia: demasiado dolor pasado del que fueron los cabezas de turco.
Renegue de mi pareja:
la abandone a su suerte contra la vida para que de alguna vez creciera;
me arriesgue a perderla, lo jugue todo a una carta
y perdi, se fue todo a la mierda.
Destrui mis amistades,
mi soledad me alejo de todo lo que habia cerca
y al abrir los ojos y salir de ella, con lo poco que quedaba,
fui inventando guerras que no venian a cuento.
Tan absurdas y tan tristes como el propio sentimiento
de vacio que empezaba a gobernarme, de nuevo.
Destrui todo,
todo cuanto me apreciaba
lo reduje a añicos a marchas forzadas. Todo cuanto a mi me conocia
lo bastante para hacerme daño,
lo destrui antes de tiempo,
como escudo para futuros males que igual jamas llegarian,
lo fui rompiendo por miedo.
Destrui mi existencia,
permiti a la oscuridad que me envolviera,
destrui todo y cuanto era,
solo por no ser yo mismo y destruir tambien el profundo abismo
de mi pereza, de mi miedo a seguir vivo.
Destrui mi conciencia,
aquello que era mi herencia y mi palacio
quedaron hechos cenizas,
ese fue el ultimo paso que faltaba.
Solo queda ya una cosa para que no quede nada,
y aqui no hay suertes que valgan...
falta un solo ultimo acto de autoterrorismo,
de una vez por todas,
acabar con esta vida
y destruirme a mi mismo.
0:56/01-09-03/kule.
Todo cuanto se me acerca lo destruyo.
Destrui a mi madre cuando naci,
fui su ultimo hijo;
Destrui mi infancia,
gane todos los golpes que salieron a sorteo
y encontre otros miles, tirados por los suelos, que no me pertenecian...
tal como los coches era mi cabeza un paragolpes.
Destrui mi pubertad,
demasiados dolores guardados casi logran
que automutilara mis manos...
pero no fui capaz.
Destrui mi adolescencia,
tantas palabras en boca y tanto amor en el silencio,
tantas verdades calladas, tantos lamentos...
me abocaban a un suicidio que por suerte no llego.
destrui mi juventud,
la lectura y el encierro en mi cabeza se hicieron con los hilos de mi vida tornandome en marioneta.
Destrui mi juventud, me hice viejo antes de tiempo,
aunque algunas veces pienso que ya naci siendo anciano.
Luego lo pienso dos veces y comprendo que no es cierto.
destrui todo lo amado,
renegue de mis raices, mi familia: demasiado dolor pasado del que fueron los cabezas de turco.
Renegue de mi pareja:
la abandone a su suerte contra la vida para que de alguna vez creciera;
me arriesgue a perderla, lo jugue todo a una carta
y perdi, se fue todo a la mierda.
Destrui mis amistades,
mi soledad me alejo de todo lo que habia cerca
y al abrir los ojos y salir de ella, con lo poco que quedaba,
fui inventando guerras que no venian a cuento.
Tan absurdas y tan tristes como el propio sentimiento
de vacio que empezaba a gobernarme, de nuevo.
Destrui todo,
todo cuanto me apreciaba
lo reduje a añicos a marchas forzadas. Todo cuanto a mi me conocia
lo bastante para hacerme daño,
lo destrui antes de tiempo,
como escudo para futuros males que igual jamas llegarian,
lo fui rompiendo por miedo.
Destrui mi existencia,
permiti a la oscuridad que me envolviera,
destrui todo y cuanto era,
solo por no ser yo mismo y destruir tambien el profundo abismo
de mi pereza, de mi miedo a seguir vivo.
Destrui mi conciencia,
aquello que era mi herencia y mi palacio
quedaron hechos cenizas,
ese fue el ultimo paso que faltaba.
Solo queda ya una cosa para que no quede nada,
y aqui no hay suertes que valgan...
falta un solo ultimo acto de autoterrorismo,
de una vez por todas,
acabar con esta vida
y destruirme a mi mismo.
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